Este trabajo ha sido realizado por la prof, Carmen Morales Ortiz cuando laboró en la Escuela de Chanta, Cajamarca. El objetivo de la investigación fue mejorar las habilidades motrices básicas de los estudiantes para que pudieran alcanzar las metas propuestas en su respectivo grado como es lograr leer y escribir, resolver situaciones problemáticas relacionadas al uso de las matemáticas
Muchas veces vi a mis niños aburridos con la aplicación de las fichas para el aprestamiento a la escritura, el avance era lento y los veía solos en su propia tarea. Comencé a darme cuenta que el problema no estaba en los niños sino en la manera cómo yo estaba trabajando y creo que estaba descontextualizando su entorno. Las actividades, al no ser significativas, efectivamente producían aburrimiento.
Mi preocupación se centró en buscar otras actividades para trabajar con los niños y les pregunté ¿Qué les gusta hacer? ellos respondieron: ¡tejer profesora!, ¡Sembrar!, escoger, pelar papas,sacar piedras, cegar...Comencé a hacer anotaciones y pensar en estas actividades y cómo ellas podían ayudar al desarrollo de destrezas motrices para el proceso de la escritura. Entonces comprendí que las actividades domesticas podían ayudar mucho.
Aprendía escuchar a los niños, los niños y sus padres se motivaron mucho. Logré promover, en los niños, habilidades psicomotrices que antes no lo había logrado. Comprendí que es mucho más importante observar las oportunidades que hay en el contexto de los niños, que criticar las dificultades. Logré a niños hábiles para el proceso de la escritura. Pero también logré a niños seguros de sí mismos, solidarios del compartir el trabajo y no ajenos a su realidad.
Rescatar la cultura de los pueblos no significa retroceder, pues, estos deben ser impulsores para generar nuevos aprendizaje y promover una vida más digna.
Prof. Carmen Morales Ortiz